viernes

Fundación de la belleza, Eduardo Galeano

Están allí, pintadas en las paredes y en los techos de las cavernas.
Estas figuras, bisontes, alces, osos, caballos, águilas, mujeres,
hombres, no tienen edad. Han nacido hace miles y miles de años,
pero nacen de nuevo cada vez que alguien las mira.
¿Cómo pudieron ellos, nuestros remotos abuelos, pintar de tan
delicada manera? ¿Cómo pudieron ellos, esos brutos que a mano
limpia peleaban contra las bestias, crear figuras tan llenas de gra-
cia? ¿Cómo pudieron ellos dibujar esas líneas volanderas que es-
capan de la roca y se van al aire? ¿Cómo pudieron ellos…?
¿O eran ellas?

Eduardo Galeano
Espejos